“El retorno del péndulo” de Zigmunt Bauman y Gustavo Dessal

EL MARCAPÁGINAS – El eminente psicoanalista Gustavo Dessal nos introduce en este libro escrito junto al consagrado sociólogo Zigmunt Bauman con Sigmund Freud como ineludible y buscado referente.

Dessal, autor también del libro de cuentos  Demasiado rojo, nos comenta para completar este El Marcapáginas: 

“Cuando me atreví a dirigirme al profesor Bauman para sugerirle una entrevista vía e-mail acerca de su relación con la obra de Sigmund Freud, no imaginé que habríamos de iniciar un diálogo que acabaría en este libro. He leído una buena parte de la abundante producción de este hombre inagotable, y siempre me ha llamado la atención su constante referencia a Freud. Creo que Bauman ha comprendido muy bien que sin una reflexión sobre subjetividad la sociología queda lastrada por la metafísica tradicional, y se vuelve inoperante para pensar los problemas del mundo contemporáneo.

El retorno del péndulo  , publicado por el Fondo de Cultura Económica ,es un diálogo sobre el neocapitalismo y sus efectos perversos sobre el sujeto. Considero que el concepto de “lo líquido” que Bauman ha propuesto como paradigma de este nuevo siglo no solo constituye una herramienta fundamental para pensar la actualidad, sino que además tiene una enorme sintonía con algunas consideraciones que el psicoanalista Jacques Lacan introdujo en la última parte de su enseñanza.

Son formas de aproximarse a la disolución de las categorías tanto clínicas como sociales que dominaron el pensamiento moderno del siglo pasado, pero que se han vuelto caducas como consecuencia de la globalización y la metamorfosis de las relaciones de poder entre el estado y el capital. Me he atrevido a promover una “conversación” entre el concepto de “lo líquido” de Zygmunt Bauman y la teoría del síntoma de Jacques Lacan, y el resultado es un libro que aspira a dar algunas pistas para orientarnos en la realidad que vivimos.

La opinión pública es cada vez más sensible al malestar creciente de la civilización, la desmesura de la desigualdad y la degradación de las condiciones de vida, y al hecho de que la sociedad de consumo no solo no aumenta el bienestar, sino que por el contrario es un espejismo que nos atraer hacia un modo de existencia cada vez más imposible de soportar”.

Scroll al inicio