120 años de Gershwin (I): Concierto en fa
MÚSICA CLÁSICA – A lo largo de los años, en Radio Sefarad hemos emitido muchas obras de George Gershwin, compositor del que hace unas semanas se cumplieron 120 años de su nacimiento y al que dedicaremos algunos programas. Lo cierto es que hasta ahora nos habíamos decantado más por su faceta de compositor de canciones jazzísticas e incluso de su ópera “Porgy and Bess”, que por obras de carácter más clásico, aunque algunas de las más importantes sí que las presentamos no hace mucho cuando, justamente, ofrecimos un ciclo por el centenario de Leonard Bernstein. Hoy os traemos una composición muy conocida e interpretada habitualmente en la que resuena la música popular, pero con un nombre tan aséptico como Concierto en fa mayor para piano y orquesta. Pero primero, vayamos presentando al personaje.
Gershwin nació como Jacob Gershovitz en Brooklin un 26 de septiembre de 1898, y fallecería antes de cumplir los 39. Era hijo de una familia de inmigrantes judíos del Imperio Zarista, con un talento para la música que se manifestó desde temprana edad, cuando, aprendió a tocar el piano por sí solo. Ante su entusiasmo, su padre la mandó con profesores que le descubrieron el mundo sonoro de los grandes compositores clásicos. En 1914 abandonó sus estudios para trabajar en una editorial de música en la que, sentado al piano, presentaba al público las melodías de moda. Pronto se animó él mismo a componer sus primeras canciones, algunas de las cuales consiguieron cierta popularidad y, sobre todo, le valieron la oportunidad de escribir su primer musical para Broadway, “La, la, Lucille”. Su inmediato éxito significó el verdadero comienzo de su carrera como compositor, siempre junto a su hermano Ira como letrista. A éste siguieron otros títulos como “Lady Be Good”, “Oh Kay!”, “Funny Face”, “Girl Crazy” y “Of Thee I Sing”, llegando a ser aún más popular que sus admirados Kern y Berlín. Seguiremos desglosando los hitos de su vida en siguientes entregas. Hoy, como anticipamos, oiremos su Concierto para piano y orquesta en fa mayor de 1925, en una grabación de 2015 en el centro Barbican de Londres con la Sinfónica de la ciudad dirigida por Michael Tison Thomas y con Wang Yuja como solista.