DE ACTUALIDAD – Como antes de cualquier comicio en un país democrático, las agencias de encuestas hacen sus vaticinios. Seguramente en países donde predomina el bipartidismo, el resultado suele ser bastante previsto (aunque no siempre, recordemos el triunfo de Trump). Lo que resulta mucho más caótico es tomar el pulso de las opciones en un país como Israel, con una enorme cantidad de partidos, muchos de los cuales superan los mínimos para obtener escaños en la Knesset, el parlamento. Y mucho más difícil predecir cómo se alinearán en posibles coaliciones. Prepárense para lo inesperado, con David Yabo.