ISRAEL EN VANGUARDIA, CON YAEL MACÍAS – Desde la última comunicación hemos vivido cómo la nave israelí “estelar” se “estrellaba” a pocos metros de la superficie lunar, aunque la hazaña dista mucho de ser un fracaso. Es más bien un acicate para seguir mejorando, camino de la Beresheet 2 en pocos años. Tampoco los que sufren del corazón deben darse por rendidos, gracias al desarrollo israelí de un corazón impreso en 3D con materiales biológicos propios del paciente, evitando el rechazo inmune. Y si de superar obstáculos se trata, no hay terreno más propicio que las inversiones de futuro, a las que no viener nada mal que se aligeren las trabas burocráticas, como el acuerdo entre EE.UU. e Israel para facilitar un nuevo tipo de visados a estos soñadores.
Caer y levantarse: luna, corazón y futuro
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