Capítulo 14: es difícil ser judío
EL ÍDISH HABLA POR SÍ MISMO – Reponemos una serie radiofónica de introducción al ídish con guión de Varda Fiszbein que Radio Sefarad produjo hace una decena de años bajo el título original “Ídish redt zij aleyn”.
¿Qué palabras aprendimos hoy?
Shnáyder: sastre.
Émes: verdad; del hebreo emét en pronunciación ídish.
Gantser: entero / entera.
Leváye: funeral, cortejo fúnebre. Del hebreo levayá, en pronunciación ídish. Esta palabra procede de la raíz que significa acompañar o acompañamiento (livá) a los deudos.
Rébe: rabino y tratamiento que se da al mismo; también se usa como fórmula de respeto hacia personas importantes, eruditos o maestros. Del hebreo rabí, en pronunciación ídish.
Linkes (plural de linke): link significa izquierda/ izquierdo; en este caso es el adjetivo izquierdista.
El ídish y su acervo cultural
Bund: significa unión o federación. El denominado con esta única palabra fue un movimiento político de ideario socialista creado a finales del siglo XIX en el imperio ruso. Su nombre completo en ídish es Algeméyner Ídisher Árbeter Bund in Lite, Poyln un Rusland, es decir “Unión general de trabajadores judíos de Lituania, Polonia y Rusia”.
Se fundó en Vilnius, Lituania, en 1897 para unificar a todos los trabajadores judíos del imperio ruso (entonces Lituania, Letonia, Belarus, Ucrania y gran parte de Polonia) en un partido socialista. Intentó aliarse con el movimiento social-demócrata ruso para luchar por una Rusia democrática y socialista que reconociera a los judíos como nación minoritaria. Generalmente se unió a los Mencheviques y se opuso a los Bolcheviques.
Se oponía también al sionismo por considerar la emigración a la entonces Palestina como una huida. Su visión era internacionalista y su interés más que en una geografía o estado particular era la promoción de la cultura, tomando ésta como a un “nacionalismo” judío cuyo idioma era el ídish. Sin embargo, muchos judíos que como trabajadores apoyaban al Bund eran a su vez sionistas. También fue respaldado por muchos intelectuales y actuaba igualmente como un sindicato a la vez que un partido político. Se constituyó en diversos países de América, ya que sus ideas fueron llevadas allí por los emigrantes de la Europa del este. Durante la Segunda Guerra Mundial sus miembros pasaron a la clandestinidad. Entre ellos, Marek Edelman, co- fundador de la Organización Judía de Combate que dirigió el levantamiento del gueto de Varsovia.
En la actualidad sigue existiendo como fuerza política muy minoritaria en algunas comunidades judías, promoviendo diverso tipo de actividades deportivas y culturales. En 1997 se celebró el centenario del Bund en Varsovia, Londres, Bruselas y Nueva York.
Ayunar para librarse del servicio militar: desde 1827 hasta 1874 el poder zarista decretó que los judíos, fueran reclutados a la edad de 12 años y cumplieran un servicio militar obligatorio de 25 años, con el fin de despojarlos de su identidad. Años después de derogada esta ley, los jóvenes judíos, seguían siendo con frecuencia maltratados y humillados cuando servían en el ejército zarista. Por esa razón trataban de evitarlo por todos los medios; en ocasiones llegaban a inflingirse daño físico como mutilarse para no ser aptos o, como aquí se cita, estar tan debilitados por el ayuno, que no se los sumara a filas.
1905: año en que tuvo lugar la primera gran revolución rusa, a la que precedieron disturbios en todo el imperio zarista. El relato que se menciona, acerca de todo un shtétl rodeado por la policía por acudir al funeral de dos jóvenes judíos de izquierda tuvo realmente lugar en Lómza. Años más tarde, en esta misma localidad polaca, cercana a Varsovia, los habitantes nativos, inspirados por los nazis, asesinaron a todos sus vecinos judíos.
Mótl / Avróm (diminutivo Avréml): dos nombres masculinos en ídish. Es costumbre entre los judíos honrar a las personas muertas imponiendo a los niños que nacen posteriormente sus mismos nombres. Lo habitual es hacerlo en recuerdo de familiares cercanos, abuelos, etc., ya que existe la creencia tradicional de que cuando se sigue esta costumbre, los fallecidos descansan en paz. También se cree que alguien sigue vivo, de algún modo, si se lo nombra, si se mantiene su memoria.
“S`is shver tsu zayn a id”…: literalmente: es difícil ser judío. Habitualmente se utiliza esta frase para indicar la gran cantidad de preceptos que deben cumplir los judíos; el mantener las costumbres tradicionales tales como las leyes dietéticas, determinadas prohibiciones, etc. Pero, en este caso, alude al feroz antisemitismo que afectaba a los judíos en la Europa del Este.