NUESTRAS COMUNIDADES – El ritual halájico judío exige que los que llegan al final de la vida sean enterrados siguiendo unas normas particulares que hacen que todas las comunidades dispersas por el mundo tengan que adquirir o consensuar con las autoridades un predio especial para tal fin. En Madrid existen parcelas destinadas a este fin en La Almudena y en el cementerio judío de Hoyo de Manzanares, pero dado que éste responde a las normativas de la comunidad ortodoxa, era necesario habilitar un nuevo espacio para, por ejemplo, los conversos al judaísmo según corrientes como el reformismo. Por ello, se ha constituido una fundación, Emuná, que ha llegado a un acuerdo con el ayuntamiento de la localidad madrileña de La Cabrera, que en unos meses habrá finalizado las obras de acondicionamiento (vallado, accesos, etc.) que permitan la celebración de estos rituales, que completan el ciclo de la vida, y de los que hablamos con Gabriel Prisiallni, presidente de Bet El Madrid.