DISTRITO KAFKA: JUDÍOS CHECOS, CON STANISLAV SKODA – En estos días en los que se conmemora el aniversario de la creación de la Checoslovaquia independiente recordamos a su primer presidente Tomáš Masaryk como defensor de Leopold Hilsner, un chico judío víctima de un libelo de sangre en 1899 – el asesinato de Anežka Hrůzová una joven costurera católica de 19 años- en plena vorágine antisemita.
Con su defensa Masaryk logró conmutara a cadena perpetua la injusta pena capital a la que había sido condenado Hilsner. El emperador Francisco Jose I liberó a Leopold Hilsner durante una amnistía, pero para siempre la vida de Hilsner estuvo marcada por este asunto judicial y político – Tomáš Masaryk le apoyó siempre incluso económicamente-, que Stanislav Skodda compara con el caso Dreyfuss.