DESDE CHILE, CON MICHELLE HAFEMANN – El pasado jueves 8 de junio, mientras se disputaba un partido de fútbol amateur entre Club Palestino y Estadio Israelita, los insultos del público asistente y las agresiones de los jugadores del primero, hicieron de lo que debía ser un encuentro deportivo y sana convivencia, en una gresca fuera de todo contexto. Y aunque la directiva de la liga en el marco de la cual se disputaba el partido sancionó a los involucrados, el episodio demuestra que con su narrativa de odio y apología de la violencia, los líderes de la comunidad palestina chilena han logrado su objetivo de importar el conflicto palestino-israelí a Chile.