HUELLAS – No nos cansaremos de repetir que un posible origen judío de un apellido, no es un indicador que certifique dicha procedencia, como los consultados a Manuel Sanvicente en este caso: Carazo, Zamora, Calderón y De la Rúa o De la Calle.
CARAZO
Castellano. Toponímico del valle o localidad de su nombre en las estribaciones de la Sierra de la Demanda, provincia de Burgos. Se desconoce su origen y significado. De diferentes familias, y de judíos y conversos en España y América del Sur. Entre los sefardíes por el mundo, el apellido aparece como Caraso, escrito con la letra s que sustituye a la z. Hay en Italia dos apellidos de hebreos de grafía parecida que son Carazzo y Carasso, y ambos tienen también origen toponímico en la ciudad de Monte Carasso.
ZAMORA
Gentilicio en otro tiempo frecuente entre los hispano-judíos. Después de 1492, los expulsados Zamora que llegaron a Polonia escribían el apellido con la letra s, “Samora”, entre otras numerosas variantes en su grafía. Figura en las listas de la Inquisición y en la Iglesia como conversos. Víctima del siniestro tribunal fue Gabriel Zamora, en la ciudad de Sevilla. Personaje polémico del siglo XVI fue el llamado “marrano” Alfonso Alcalá Zamora, escritor y hebraísta.
CALDERÓN
Aumentativo de la voz castellana “caldero” y relacionado con una labor ocupacional. El primer personaje conocido en llevar el apellido se cree que fue Fortún Ortíz. Considerado de origen judío por algunos autores, muy numerosos en la judería de Segovia, Calderón aparece también en familias gentiles. Desde Álava se extendió por España y América. Los judíos Calderón que no aceptaron la conversión forzada, buscaron asilo en Portugal, Holanda y en el Imperio Turco. Diego Calderón, abuelo de Bartolomé de las Casas, fue condenado a la hoguera en 1491 por judío en la ciudad de Sevilla y otros familiares del mismo nombre en años sucesivos. En Esmirna había numerosas ramas Calderón durante el siglo XIX hasta el año 1930, así como en Monastir, de donde desaparecieron en 1941, llevados a los campos de concentración.
DE LA RÚA o DE LA CALLE
Son distintos apellidos con el mismo significado. Rúa de Galicia y Portugal procede posiblemente del latín “ruga”, que significa arruga. De los sefarditas de Hungría y Oriente Próximo. De la Calle de zonas hispano parlantes y derivado del hebreo “káhal” con el significado de sinagoga, congregación, asamblea. Otra procedencia posible en la lengua árabe “Cal” Calle. De comunidades sefardíes dispersas y familias de origen converso. Antes de la Expulsión tanto A Rúa como De la Calle tenían el significado oculto de “ir, estar o venir de la sinagoga o del taller de platería”. Variantes de Rúa son De la Rúa y Ruah.