Erich Kempka, el chófer y amigo que cremó a Hitler
LUZ Y OSCURIDAD BAJO EL NAZISMO, CON FERNANDO NAVARRO GARCÍA – Erich Kempka fue el chófer personal de Adolf Hitler, labor que realizó entre 1934 y 1945. Estaba presente en la zona de la Cancillería del Reich el 30 de abril de 1945, cuando Hitler se suicidó en el Führerbunker. Fue precisamente Kempka el que proporcionó la gasolina para la cremación de Hitler y Eva Braun en los jardines de la cancillería. “Gracias a él, nos cuenta Fernando Navarro García- Director de INNOVAÉTICA, Presidente de CITMA (Centro de Investigaciones sobre los totalitarismos y movimientos autoritarios) y autor del Diccionario biográfico de nazismo y III Reich,(Ed Sepha) – tenemos más detalles acerca del suicidio de Hitler y Eva Braun”
Navarro García nos ofrece algunos detalles curiosos de este personaje tan cercano al monstruo: Erich Kempka en 1937 integra el proyecto de las Lebensborn, el experimento eugenésico nazi, en una muestra más de fidelidad al nazismo y su líder. Tras el suicidio de los Hitler, es el propio Kempka quien le arrebata el cadáver de Eva Braun a Martin Bormann (al no tratar los restos de Braun “con el debido respeto”) y con 200 litros -las últimas reservas de gasolina de todo Berlín- procede a la cremación.
No fue juzgado por crímenes de guerra y murió “como muchos de esos personajes que habiendo sido conocedor de los crímenes del nazismo, no sufrió las consecuencias de sus actos”. Erich Kempka, denuncia Fernando Navarro García, murió tranquilamente, habiendo recibido los derechos de autor de su autobiografía Yo quemé a Hitler.