A FONDO – Según el periodista Natalio Steiner (recientemente inmigrado a Israel, pero gran conocedor del país como director de Comunidades Plus), el tema de la reforma judicial que ha polarizado a la sociedad israelí las últimas semanas no es un debate nuevo, aunque lo que no se había visto hasta ahora es la “grieta” que amenaza a la sociedad: un país que ha logrado sobreponerse a ejércitos de países vecinos, grupos terroristas y amenazas vitales, parece abocado a un crudo enfrentamiento interno. En realidad, apunta Steiner, los choques actuales son herederos de las mismas posturas enfrentadas no resueltas desde el nacimiento del sionismo moderno, lo que ha llevado a posponer sine die la adopción de una Constitución consensuada, tarea que Israel ya no puede darse el lujo de seguir aplazando.