Gad Elmaleh nos aligera el verano
EL MICRÓFONO DE ALICIA PERRIS – Este showman, actor y bailarín francés, nacido en Casablanca, de 47 años y padres judíos, sefardí lógicamente, ha hecho reír y reflexionar a los públicos de Francia, Canadá y Estados Unidos, sin olvidarse de las comunidades israelíes que en el país de Medio Oriente, tuvieron que exiliarse recientemente de Francia por razones de inseguridad y peligro para sus vidas.
No siempre se coincide en el humor, difícil a veces de compartir, porque es una marca genética, de impronta tribal, como la comida, la danza o la filosofía, también el idioma. La base profunda de la comicidad de este chico de barrio árabe al que su padre le explicaba en la playa atlántica, “Si vas todo recto, llegarás a América”, descubrió, como tantos otros inmigrantes, que se había acabado la era del “sueño americano”, es lo gestual, el mimo.
Gad Elmaleh es otro inmigrante más en busca de la suerte, que, probablemente, no hubiera conseguido, en su país de origen. Fantaseamos con irnos de la tierra natal porque creemos que vamos a vivir mejor en otra parte. Pero Gad nos confiesa que siempre se vuelve al origen, al núcleo de donde partimos. Somos, también, nuestro propio comienzo fundacional, la travesía de Ulises y el regreso.
Mimo también fue su padre, a quien Gad (que significa “suerte” en hebreo), le ayudaba en las actuaciones de comediante desde que tenía 5 años. Y aprendió a comunicarse en inglés, en francés, en hebreo, en árabe y en dariya, la lengua de los bereberes del Norte de África, donde nació.
Lo que relata, lo que vive y transmite, es una especie de frecuentación de “Un verano en la Goulette” (Férid Boughedir, 1996), aquella película que mostraba, hace décadas, la apacible convivencia de adolescentes cristianos, musulmanes y judíos en busca del descubrimiento del sexo y el amor, de la vida.
Probablemente ese universo se haya desvanecido para siempre, pero vuelve con Gad, el mago que, después de muchos amores, con algunas famosas actrices y bailarinas, aterrizó en Mónaco para enamorarse de Carlota Casiraghi, la nieta de Grace Kelly, con la que tuvo un hijo.
Su vida se construye todavía como una inacabable novela río. Intentaremos que se diviertan en esta nueva emisión de El micrófono de Alicia Perris, con una mirada más relajada y esperanzada en la vida, a pesar de los tiempos poco propicios que muchas veces nos toca vivir. Nosotros, en Radio Sefarad, como los clásicos grecolatinos, pensamos que “ se pueden corregir las costumbres, haciendo reír”.
Gracias por leernos y escucharnos y los dejamos con una oferta extra abajo en Internet, del trabajo de Gad Elmaleh.
VTEP : LET’S DANCE – GAD ELMALEH ¡Bailemos!)
La música de la película “Un Bonheur n’arrive jamais seul”, interpretada por Gad Elmaleh !!!
Página web