POLIN: JUDÍOS POLACOS CON ELZBIETA BORTKIEWICZ – Además de recordar la inmensa relevancia del archivo Oneg Shabat, el testimonio documental más importante de la Shoá- Elzbieta Bortkiewicz nos habla de las únicas tres personas que sobrevivieron de los que formaban parte del grupo encabezado por Emanuel Rigelblum. Co-creadores y garantes de este archivo fundamental conocemos la labor de Hersz y Bluma Wasser, y Rachela Auerbach.
Hersz Wasser (13 de junio de 1910 – 1980) fue un economista y secretario de la organización clandestina Oneg Shabat, fundada por Emanuel Ringelblum en el Gueto de Varsovia durante la Segunda Guerra Mundial. Su labor principal consistió en gestionar las operaciones diarias del archivo, incluyendo la obtención y catalogación de documentos, la contratación de colaboradores y la administración financiera. Tras proporcionó información crucial para la recuperación de partes del archivo oculto.
Bluma Wasser (de soltera Kirszenfeld, 1912 – 1990) fue una maestra polaco-judía y miembro activo de Oneg Shabat. Estaba casada con Hersz Wasser y, durante su participación en la organización, se dedicó a copiar documentos y realizar entrevistas. Ella y su esposo lograron escapar de un tren con destino a Treblinka, sobreviviendo al Holocausto. Su testimonio y esfuerzos posteriores fueron fundamentales para la recuperación y preservación del archivo de Oneg Shabat.
Rachela Auerbach (1903 – 1976) fue una escritora, periodista y miembro destacado de Oneg Shabat. Antes de la guerra, era una figura reconocida en los círculos literarios judíos de Varsovia. Durante su tiempo en el gueto, documentó meticulosamente las condiciones de vida y las atrocidades cometidas. Después de sobrevivir al Holocausto, desempeñó un papel crucial en la localización y recuperación de las partes enterradas del archivo de Oneg Shabat, asegurando que las evidencias recopiladas fueran preservadas para las generaciones futuras.