EL NUEVO DESORDEN MUNDIAL, CON RICARDO LÓPEZ GÖTTIG – En alguna ocasión anterior abordamos en esta columna la singularidad del caso de Hong Kong que, según una declaración conjunta de la República Popular China y la antigua metrópoli (Reino Unido), pasaría a forma parte integral de la primera en el 2047. Sin embargo, en los últimos años (especialmente desde el estallido de la pandemia del COVID19) Beijing ha ido suprimiendo libertades amparándose en una ley interna de Seguridad Nacional, demostrando cada vez más un clima de autoritarismo, tanto en este asunto como en otros de carácter étnico o religioso, por ejemplo. Ello invita a pensar (y a temer) cómo sería una posible reincorporación a una única China de Taiwán (anteriormente conocida como República Nacional China).