La boz de Bulgaria. “Don Abrabanel i Formoza”, de Aharon Menahen
SEFER: DE LIBROS Y AUTORES – La lengua y cultura de los judíos sefardíes está “No extinta, olvidada”, remarca Tania M. García Arévalo de la Universidad de Granada, quien nos presenta un ejemplo de obra científica accesible y reivindicativa, fruto de un trabajo conjunto realizado por expertos en judeoespañol de todo el mundo el año pasado en la Ochena Universita Sefaradi de Enverano en Halberstadt y que publica ahora la Editorial Tirocinio : una obra teatral Don Abrabanel i Formoza de Aharon Menahen sobre la figura de Isaac Abravanel, quién denunciara la injusticia de la Expulsión ante los Reyes Católicos.
Tirocinio. La transcripción y edición de la obra teatral Don Abrabanel i Formoza de Aharon Menahem fue elaborada por los participantes (estudiantes y profesores) de la Ochena Universita Sefaradi de Enverano en Halberstadt (2019), que se ha fijado como objetivo salvar del olvido las novelas y obras de teatro judeoespañoles mediante la transliteración y darlas a conocer a un mayor número de lectores interesados en las temáticas hispano-judías y sefardíes. Participaron en 2019: A. August-Zarębska (Wroclaw), Carlos J. Puga Medina (Granada), Doğa Filiz Subaşı (Ankara), Ilaria Breata (Hamburgo), Ilil Baum (Jerusalén), Leon Benatov (Sofía), M. Studemund-Halévy (Hamburgo), Shai Cohen (Turín), Stevan Milovanović (Belgrado), Suzy Gruss (Bar Ilan), Tania M. García Arévalo (Granada),y Ya‘akov Elad (Ra‘anana).
La figura de Abravanel apareció como motivo popular en el teatro judío después de 1880. Aharon Menahem se interesó por un personaje sefardí como héroe de su trabajo. Para muchos de sus contemporáneos, Don Isaac Abravanel se convirtió en un actor histórico, una figura de inspiración y modelo, en la que se unen funciones y cualidades sociales elogiadas en destacados judíos como los Rothschild, Camondo o Hirsch,quienes combinaron sus actividades con el mecenazgo, la fundación de sinagogas o la caridad en general, pero también emplearon todos sus esfuerzos en establecer en Palestina un hogar nacional para los judíos.
Así, la historia del histórico Don Isaac Abravanel muta en una lección de historia contemporánea que, por consiguiente, debe terminar en la Tierra Prometida: Sión. La versión impresa de Abrabanel fue publicada por el periódico La Verdad de Sofia, dirigido por Albert Pipano.