LOS PASOS DE SEFARAD EN EL NUEVO MUNDO, CON DAVID ROSENTHAL – Según el trabajo investigativo de Luis Wong Vega, Ph.D. de la Universidad Católica Santa María La Antigua (USMA), Panamá es un estado multiétnico. Las expresiones de esta diversidad se manifiestan en todos los órdenes de la vida del país, en mayor o menor medida, pero siempre con expresiones que evidencian su presencia y que aportan riqueza a la amalgama resultante que es su panameñidad. Según el escritor Edilberto Gonzáles Trejos, “descendientes de los ‘anusim’, marranos o criptojudíos procedentes de la Península Ibérica han vivido en Panamá desde comienzos del siglo XVI”. Añade este autor que “judíos, tanto sefardíes como ashkenazíes comenzaron a arribar a Panamá en cantidades importantes recién a mediados del siglo XIX, atraídos por alicientes económicos tales como la construcción del ferrocarril bioceánico y la fiebre del oro en California”. En un trabajo periodístico publicado en el diario español El País de hace, más o menos, un lustro, se hizo una estimación de la población judía en Panamá. El autor señalaba entonces que “la comunidad judía panameña oscila entre 15.000 y 17.000 integrantes, de los que de 9.000 a 12.000 son descendientes de los sefardíes, según diversos cálculos de las organizaciones hebreas de Panamá”. Probablemente, esta población podría rondar las veinte mil personas hoy en día. La comunidad judía ha hecho aportes sustanciales a la institucionalidad panameña, particularmente en el ámbito sociocultural. La autora Leizel Verbel señala que “gracias a la colaboración de la comunidad judía de Panamá, se estableció el Cuerpo de Bomberos de Panamá, la Orquesta Sinfónica Nacional, la Universidad Tecnológica, por mencionar las más notorias. Más recientemente se inauguró el Biomuseo de Panamá, con una sustancial donación de la comunidad judía”. Además, dado el relativamente pequeño tamaño de la comunidad judío-panameña, podría pensarse que el número de artistas e intelectuales de raigambre hebrea sería relativamente bajo. Pero, según muestran diversos estudios sobre la presencia judía en las artes y la literatura en Latinoamérica, en muchos casos, la participación de los hebreos es significativamente alta, yéndose mucho más allá de la proporción a esperar según el tamaño demográfico de la población judía en determinado país.
La poesía hebrea panameña
David Rosenthal, historia, Los pasos de Sefarad en el Nuevo MUndo, Panamá