FUERA DE FOCO, CON BRYAN ACUÑA – Las figuras principales de organizaciones islamistas como Hamás, Daesh, Al Qaeda y Hezbolá, entre otros, son complejas de lograr descifrar desde una perspectiva simplista asociada solo con poder o riqueza, por cuanto ellos tienen el convencimiento de que su labor sobrepasa los elementos espirituales, y que su labor es mesiánica y redentora. Por este motivo el análisis intenta acercarnos a una perspectiva desde la personalidad de los diferentes liderazgos y entender por qué son capaces de sacrificar a personas que ellos dicen “defender”, pero a la vez están dispuestos a morir ellos y por lo cual, a diferencia de otros líderes que viven en el exilio, deciden conformarse con poco, pero controlando masas de personas que pueden estar en peligros inminentes.
Al tratarse de un elemento de características metafísicas relacionadas con el mundo venidero, con el paraíso y sobre una lucha por la verdadera doctrina religiosa, los elementos materiales como la riqueza, el control de recursos y demás son herramientas para llevar a cabo su lucha, pero no un fin por sí mismo. Esta semilla es implantada en otros que siguen sus pasos y esto hace más complejo el panorama de la lucha contra el radicalismo islámico y sus precursores.
