“La vida como parábola”, de Pinjas Sadé (Pinhas Sadeh)

OT: LETRAS ISRAELÍES, CON ANA BEJARANO – “Obra de culto”, “Supuso un cambio estético fundamental”, “Incita al debate” “Libro nada cómodo…pero maravilloso”. Con prólogo de Mario Satz y traducción de Encarna Varela, así describe Ana Bejarano esta peculiar novela filosofopoética, la autobiográfica (de un autor de 27 años…) de Pinjas Sadé,  (Pinhas Sadeh) un “inconformista nato”.

Un inconformista para quien lo único importante era la escritura, dispuesto a sacrificar incluso el amor, su matrimonio, cuando fue preciso “Soy demasiado feliz para escribir” dijo. Lo amarán o lo odiarán, pero este “artista no, artesano” nos hace reflexionar. Ese es su regalo.

Ed. Estudios Judíos Contemporáneos. Universidad de Granada. La originalidad de “La vida como parábola”, novela autobiográfica del escritor judío Pinjas Sadé, es el secreto de esta obra capital de la literatura hebrea contemporánea, según un estudio que con el título “Pinjas Sadé, una voz disonante en la literatura israelí”, publica la profesora María Encarnación Varela Moreno, del departamento de Estudios Semíticos de la Universidad de Granada, en la sección de hebreo del número 54 de la revista “Miscelánea de Estudios Árabes y Hebraicos”.

Aparecida recientemente en español, “La vida como parábola” de Pinjas Sadé es, a decir de la autora del estudio, un canto al individualismo más extremo. La profesora de la UGR señala que esta obra apareció en una época marcada en Israel por la llamada Cultura Estatal, basada en valores colectivos, razón ésta por la que la publicación de la misma resultó muy polémica en su tiempo. “No obstante –afirma la profesora Varela– fue tal vez la llave que abrió la puerta a la expresión personal que continuarían los escritores de la llamada Generación del Estado”.

Sin embargo, en el caso de Pinjas Sadé no se puede hablar de marginación existencial. “Nada le hacía distinto a sus contemporáneos israelíes, su marginación intencional se debe a la conciencia de estar cumpliendo una misión, primero de buscador, luego como profeta”.

Según María Encarnación Valera, “La vida como parábola” y las demás obras de Pinjas Sadé son “una confesión de sus vivencias íntimas, de sus dolores, amores, experiencias, pecados, anhelos y expectativas”.

Para la autora del estudio, la producción de este escritor judío es única e irrepetible: “Hay gente que pretende imitar a Pinjas Sadé pero es imposible, no creó escuela, su misma persona es resumen de la condición humana”.

Scroll al inicio