MÚSICA CLÁSICA – Leopold Godowsky fue uno de los pianistas más reconocidos de su época, compositor y pedagogo pionero en la aplicación de técnicas pianísticas que perduran hasta hoy, como la relajación del peso y la economía de movimientos, que su alumno Neuhaus supo transmitir a una generación de virtuosos como Richter, Gilels o Lupu, entre otros. Esa característica fue la que le valió el apodo de “Buda del piano”, pero no fue lo más asombroso de su vida. Nació en 1870 en una aldea de lo que hoy es Lituania, donde su padre murió siendo un bebé, por lo que fue criado en casa de unos parientes en Vilnius que tenían un piano que aprendió a tocar solo, llegando a componer piezas propias con sólo cinco años y dar su primer concierto a los nueve, cosechando tal éxito que a los 14 partió a los EE.UU. para una gira de tres años, antes de volver a Europa y ser apadrinado por Saint-Saëns. Tres años más tarde volvería a América, ahora para dar clases y convertirse en una celebridad, experto en el repertorio del siglo XIX. También realizó algunas grabaciones en rollos de pianola, como la siguiente Balada Nº 1 en sol menor opus 23 de Chopin.
Acabada la Primera Guerra Mundial realizó extensas giras por todo el mundo, pero su vida personal empeoró con la enfermedad de su esposa, el alejamiento de su hijo Gordon, la Gran Crisis económica de 1929 y un íctus que lo dejó parcialmente paralítico, lo que lo arrastró a una profunda depresión, ahondada por el suicidio de aquel hijo y la muerte de su mujer. Godowsky se mudó a vivir con su hija Dagmar pero ya no volvió a dar conciertos públicos, sólo caseros para amigos y admiradores. Durante los últimos años de vida, hasta su muerte un 21 de noviembre de 1938, intentó (sin éxito) organizar un Concejo Internacional de Música y Músicos. De sus hijos, la citada Dagmar se convirtió en actriz de películas mudas, llegando a protagonizar alguna junto a Rodolfo Valentino. Otro hijo con su mismo nombre fue el co-inventor del film fotográfico transparente Kodachrome, además de violinista, y se casó con la hermana pequeña de George Gershwin. Oímos sus Cuatro poemas: Devoción, Confesión, Adoración y Anhelo, interpretados por Emanuele Delucchi.
Como compositor, Godowsky se especializó en la paráfrasis de obras pianistas de otros compositores, es decir, en enriquecer sus obras con nuevos elementos de contrapunto y armonía, como sus 53 Estudios sobre los Estudios de Chopin, piezas consideradas entre las más difíciles de interpretar. Pero también compuso obras originales como Phonoramas (una suite inspirada en la exótica música de gamelán de aquella isla) o la Passacaglia con que despedimos este homenaje, interpretada nuevamente por Emanuele Delucchi.