DESDE SAN PABLO (BRASIL), CON ALBERTO MILKEWITZ- Ante la marcha del embajador brasileño de Jerusalén, los judíos brasileños se sienten “profundamente incomodados” y no encuentran aceptable muchas de las líneas argumentativas con las que el gobierno de Dilma Rousseff ha intentado justificar esta decisión política. Milkewitz nos señala que ante la situación tanto la Confederación Israelita Brasileña como la Federación Israelita de San Pablo han optado por el diálogo y por hacer entender la postura de Israel en contra del grupo terrorista Hamás.

Las calles brasileñas son además escenario de manifestaciones en contra -capitaneadas por la extrema izquierda- y en pro de Israel. En estas últimas el mensaje de solidaridad para con las víctimas inocentes de ambos bandos es claro. También las comunidades judías son activas en los medios de comunicación y en las redes sociales y la presencia y los argumentos de los judíos brasileños se han podido sentir en los periódicos y las emisoras de televisión, en cadenas de la importancia de Globo o Gaceta.

Ahora que el antisemitismo subterráneo -así lo define nuestro colaborador- que existe en Brasil – se manifiesta con esvásticas y eslóganes como “muerte a los judíos” las comunidades se esfuerzan, desde los valores democráticos, por sacar a la luz la verdad.