BIBLIOTECA DE LA DEPORTACIÓN, CON JAVIER FERNÁNDEZ APARICIO – ¿Es posible perdonar el Holocausto? ¿Quién lo puede hacer en el caso de que sea legítimo? ¿Olvidar significa perdonar? Estas son algunas de las preguntas que nos traslada Javier Fernández Aparicio al amparo de Simon Wiesenthal y su libro (Fernández A. prefiere y nos cuenta porqué el título original de El girasol: Sobre las posibilidades y los límites del perdón) Los límites del perdón, en el que el más conocido “cazanazis” plantea dilemas morales que no sólo tienen que ver con el pasado. Primo Levi, el nazi Albert Speer, Jean Améry o el Dalai Lama son algunas de las personalidades que respondieron a las preguntas que les planteó y nos plantea Wiesenthal.
Los límites del perdón. Dilemas éticos de una decisión Ed. Paidós. Un día, mientras estaba recluido en un campo de concentración alemán, Simon Wiesenthal fue conducido desde su puesto de trabajo hasta el lecho de un miembro de las SS que estaba a punto de morir. Atormentado por los crímenes en los que había participado, el soldado quería confesarse y obtener la absolución de labios de un judío. Este extraño encuentro y el dilema moral que le produjo desencadenó una serie de cuestiones morales sobre la posibilidad y los límites del perdón. ¿Podemos y debemos perdonar a un criminal arrepentido? ¿Podemos perdonar los crímenes cometidos contra los demás? ¿Cuál es la deuda que tenemos con las víctimas? Veinticinco años después, Wiesenthal preguntó a un grupo de famosos intelectuales qué hubieran hecho en su lugar. Una vez recopiladas todas las respuestas en un volumen, éste se convirtió en un clásico de la literatura sobre el Holocausto y en una piedra de toque del debate moral entre las distintas religiones.
Esta edición revisada incluye cuarenta y seis respuestas (diez de ellas extraídas del libro original) aportadas por eminentes teólogos, líderes políticos, escritores, juristas, psiquiatras, activistas pro derechos humanos, supervivientes del Holocausto y testigos de los genocidios de Bosnia, Camboya, China y Tíbet. Sus respuestas reflejan a la perfección sus diferentes doctrinas –judía, católica, budista, musulmana, secular y agnóstica– y nos recuerdan que la pregunta que Wiesenthal les planteó nunca podrá limitarse a los acontecimientos del pasado.