UNIDOS CON (JACOB) ISRAEL – La crónica de Jacob Israel nos habla de los 17 morteros, cohetes y restos de “fuego errante” que han aterrizado y aterrorizado a la población israelí cercana a la frontera siria, en la zona de los Altos del Golán en la última semana. Israel espera que tras el alto el fuego que acaba en pocas horas, estas agresiones (intencionadas o no) desaparezcan y no obliguen a asumir una respuesta más contundente de la que hasta ahora se ha dado. Nadie está interesado en que ello suceda: ni Israel (que prefiere mantener su neutralidad en el conflicto vecino y seguir demostrando cuán insegura sería su situación si devolviese los territorios anexionados en la ladera del monte Golán), ni el presidente sirio, ni su valedor Putin ni sus esbirros de Hezbolá. Aunque un operativo militar israelí a mayor escala quizás sí beneficiaría a Irán, no es ése su objetivo inmediato tampoco. Sólo el tiempo tiene la respuesta, pero éste no parece que vaya a ser un verano bélico para Israel
“Objetos perdidos” en la frontera siria
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