POR ISRAEL EN VOZ, CON ISRAEL WINICKI – Un refugiado palestino (en realidad habría que decir un descendiente hijo, nieto o bisnieto de los que abandonaron Israel en 1948 a instancias de sus dirigentes, como nos recuerda Israel Winicki) recibe cuatro veces más dinero -de la ONU, a través de la UNRWA- que cualquier otro refugiado de los que en el mundo son, por ejemplo, los sirios que han tenido que abandonar su país en los últimos años.
Winicki denuncia este hecho que dice, “sólo podría revertir la ONU”. Precisamente su Secretario General, Antonio Guterres, se haya de visita oficial en Israel, protagonizando -apunta Israel Winicki- un “diálogo de sordos” cuando Israel le pide, por ejemplo que frene a Irán en Siria y un mejor trato en la ONU. Y es que a Guterres, afirma Winicki, sólo parece importarle Gaza.