PONLE NOTAS – Es muy poco lo que podemos contar de Pavel Levin, no porque no lo valga, sino porque no lleva mucho tiempo en Israel, país al que emigró desde Rusia, llevando consigo un violín y un virtuosismo que ha dejado asombrados a muchos. Básicamente es un músico de estudio, por ejemplo, para Idan Raichel, pero también se prodiga en conjuntos de nuevos inmigrantes del este de Europa, por ejemplo junto al acordeonista Emil Aybinder o en grupos de música klezmer. Los temas que les presentaremos pertenecen a un disco, el cuarto de la serie El alma del violín judío, con algunas de las melodías más famosas de ese repertorio, y subtitulado Melodías melancólicas. Desgraciadamente, la discográfica no ha incluido ni en el folleto ni en su página web más datos sobre el músico y quienes le acompañan. Simplemente les diremos las canciones que se escucharán, empezando por la popular israelí Keshehalev koev, Cuando el corazón duele, también conocida como Shemá Israel. Le siguen: Papirosn (Cigarrillos), la jasídica Ana bekoaj, luego Dona Dona, la famosa My Yiddishe Mame (Mi madre judía), Jveis nit Jguedenk nit (No sé, no me acuerdo) y acabamos con Dem MIlners Trern (Los sueños del molinero)