“Poklosie” (2012), de Wladyslaw Pasikowski (Polonia)

FILMOTECA, CON DANIELA ROSENFELD –

Guion: Wladyslaw Pasikowski, basado en el libro Neighbors de Jan Gross. Reparto: Maciej Stuhr, Ireneusz Czop, Zbigniew Zamachowski, Danuta Szaflarska, Jerzy Radziwilowicz, Zuzana Fialová, Wojciech Zielinski, Danuta Borsuk, Andrzej Mastalerz. Premios: Jan Karski Eagle Award 2013, Mejor Película Festival de Cine de Jerusalén (Premio Avner Shalev Yad Vashem Chairman), Mejor director y mejor diseño de producción premios del cine polaco.

La película se desarrolla en el año 2001 y cuenta la historia de Franek Kalina, un polaco que vive en los Estados Unidos, que después de muchos años vuelve a su ciudad natal en la Polonia rural donde su hermano Jozef sigue trabajando en la granja familiar. Aparentemente nada ha cambiado en el pueblo, a excepción de su hermano Josef, al que su mujer ha abandonado y que ha despertado la ira de sus vecinos por su obsesión por la desaparición de sus vecinos judíos durante la guerra. Estas desapariciones siguen siendo un tema tabú en la pequeña localidad rural. Durante las noches, Jozef arranca las antiguas lápidas que fueron sustraídas del cementerio judío y posteriormente utilizadas para pavimentar las calles del pueblo (práctica habitual en Polonia durante y después de la guerra). Una vez rescatadas, las coloca en un nuevo cementerio judío que ha creado en uno de sus campos de trigo, después de restaurar cuidadosamente las inscripciones en hebreo. Franek no entiende la obsesión de su hermano, pero poco a poco se une a él y comienzan a investigar, descubren que la historia oficial que cuentan sus vecinos sobre el asesinato de los judíos del pueblo y su intención de volver para recuperar sus tierras es una gran mentira.
Antes de que el film se estrenará, la prensa polaca ya se hacía eco de las numerosas dificultades que Pasilowski tuvo que enfrentar durante la década que duró el proceso de realización: desde los múltiples problemas para financiar la película debido a lo controvertido del guion, hasta las dificultades para decidir la forma más acertada de afrontar un tema que para la mayoría de los polacos sigue siendo tabú. Para el guion, el director se inspiro en el libro Neighbors de Jan Gross, libro inspirado en hechos reales que describe como la comunidad judía de Jedwabne fue asesinada el 10 de julio de 1941, no por los nazis, como afirma la versión oficial de la historia polaca, sino por sus vecinos. El libro provocó una gran controversia cuando fue publicado en el año 2001, ya que el revisionismo comunista había reescrito la historia del Holocausto en la narrativa nacional de Polonia, reforzando la percepción de los polacos como víctimas absolutas. El libro de Gross sirvió como catalizador para que el pueblo polaco revisara su historia y comenzara tratar el tema.
A pesar de que la película está inspirada en el libro, no es una adaptación ni una reconstrucción histórica. Poklosie se adentra no solamente en explicar unos hechos habituales aunque profundamente lamentables a finales de la primera mitad del siglo pasado (la apropiación de bienes: joyas, dinero, terrenos por parte de los vecinos de las aldeas y ciudades, pertenecientes a los judíos exterminados), sino que también pone de manifiesto una verdad escalofriante: que muchos de los exterminios no fueron perpetrados por los soldados nazis. Envidias, venganzas y sobe todo codicia hicieron que muchas personas se viesen empujadas al horror dando rienda suelta a sus más profundos y oscuros instintos. Estos hechos acaban convirtiéndose en motivo de vergüenza, en secretos y, finalmente, en olvido. Porque el no preguntar conduce, irremediablemente al no saber.
Pasikowski utiliza a los hermanos Kalina para poner de manifiesto este doble sentimiento. Por un lado, Franciszek estará centrado exclusivamente en ayudar a su enajenado hermano, sin querer distanciarse y ver lo que realmente está pasando. Como una forma de demostrar al espectador que, a veces, nos quedamos con la superficialidad de la verdad por no querer saber más, por si es demasiado peligroso, demasiado insoportable. El hermano mayor confía al comienzo en los vecinos, para darse cuenta después de su error. Y el hermano pequeño, tras vivir el acoso por parte del pueblo entero, será víctima también de él aunque haya cambiado de opinión. Porque no hay nada más peligroso que la masa enfurecida. Un film que no sólo es una reivindicación de los derechos judíos, sino que pone en la balanza muchos más elementos.
La película, ha sido duramente criticada por los nacionalistas polacos, que opinan que es propaganda anti-polaca y que manipula la verdad histórica. La extrema derecha ha llegado a censurar el film en varias salas y el protagonista, Maciej Stuhr, ha recibido amenazas de muerte. El film no cuenta con grandes héroes, con salvadores, ni siquiera con un personaje judío vivo en toda la trama. No hay escenas de guerra, ni escenas del holocausto. Incluso, a pesar de tratar sobre las relaciones entre judíos y polacos y la destrucción de los judíos polacos durante la Segunda Guerra Mundial, no vemos reconstrucciones o flashbacks de la vida judía ni de la presencia judía. Pero eso es precisamente lo que lo hace tan impactante. Probablemente sea una de las películas más importantes que se hayan realizado en Polonia sobre el tema del antisemitismo, ya que también muestra el antisemitismo cotidiano y el contemporáneo en el seno de la sociedad.