POLIN: JUDÍOS POLACOS, CON ELZBIETA BORTKIEWICZ – “¿Viviremos para ver el día en que las autoridades polacas admitan que entre los polacos, en general, no había simpatía por los judíos y que la participación polaca en el Holocausto es un hecho histórico?” Esta es la pregunta por la que la periodista Katarzyna Markusz ha sido interrogada por la policía polaca. Una pregunta que muchos nos hacemos.
La condena contra dos historiadores (en la imagen) y el interrogatorio a esta periodista han desatado las protestas de organizaciones internacionales como Yad Vashem. Como nos recuerda Elzbieta Bortkiewicz, el gobierno ultranacionalista polaco de Ley y Justicia (PiS), en el poder desde 2015, ha promulgado leyes revisionistas, entre ellas contra la investigación independiente, que se han traducido en una primera condena contra los historiadores, Jan Grabowski, profesor de la Universidad de Ottawa y premio Yad Vashem por sus trabajos sobre la Shoá, y Barbara Engelking, directora del Centro Polaco de Investigación del Holocausto. Ambos han sido condenados a rectificar un párrafo de un ensayo de 1.600 páginas titulado Noche sin fin: el destino de los judíos en la Polonia ocupada.
En el libro se sostiene que el alcalde del pueblo de Malinowo, en el noroeste de Polonia, Edward Malinowski, robó a una mujer judía a la que rescató y entregó a los ocupantes nazis a judíos escondidos en un bosque. Los investigadores fueron denunciados por la sobrina de 80 años del alcalde, Filomena Leszczynska, que contó con el apoyo de organismos cercanos a Ley y Justicia, como la Liga Polaca contra la Difamación y el Instituto Nacional de la Memoria.
“En la operación caza del judío participaron muchos polacos pro nazis”; “Los documentos hablan por sí mismos” sentencia Bortkiewicz que añade que, si bien es cierto que muchos polacos fueron también Justos y héroes en el auxilio a los judíos, la responsabilidad polaca en la Shoá es un tema que hay que investigar y, afirma Elzbieta B, “hay que decir la verdad”…como ha hecho ella hoy valientemente.
