Salmo 122: cántico para los peregrinos que suben a Jerusalén

HABLEMOS DE LA BIBLIA, CON IRIT GREEN – Cántico de las subidas, de David.
¡Qué alegría cuando me dicen:
«Vamos al templo del Señor»!
Jerusalén,
¡ya estamos dentro de tus puertas!
Jerusalén, ciudad construida
para que en ella se reúna la comunidad.
A ella vienen las tribus del Señor
para alabar su nombre,
como se le ordenó a Israel.
En ella están los tribunales de justicia,
los tribunales de la casa real de David.
Digan ustedes de corazón:
«Que haya paz en ti, Jerusalén;
que vivan tranquilos los que te aman.
Que haya paz en tus murallas;
que haya seguridad en tus palacios.»
Y ahora, por mis hermanos y amigos diré:
«Que haya paz en ti.
Por el templo del Señor nuestro Dios,
procuraré tu bien.»

Scroll al inicio