LOS PASOS DE SEFARAD EN EL NUEVO MUNDO, CON DAVID ROSENTHAL – La Guayana, vasto territorio del cual Surinam es sólo una parte importante, constituyó una “tierra de nadie” desde su conquista por los españoles, a fines del siglo XVI. Durante la primera mitad del siglo XVII tanto colonos holandeses como ingleses se establecieron en este territorio, en especial en las cercanías del río Surinam. La presencia de judíos “portugueses” en aquella región, entre 1640 y 1650, es poco probable y sólo fue supuesta por una errónea lectura de la fecha de un contrato matrimonial judío (ketubá) realizado en Surinam, aparentemente en 1643. Existen conjeturas de que en 1652 algunos judíos provenientes de Inglaterra llegaron con Lord Willoughby a Surinam, para radicarse en la “sabana”, cerca del canal de Cassipoera. La falta de documentación no nos permite suponer, salvo en algunos casos aislados, que se hayan establecido más judíos en esta región sino a partir de 1662, año en que Sir Willoughby – Lord of Parham, gobernador de Barbados – obtuvo una autorización de parte del rey Carlos II de Inglaterra, para colonizar el territorio de la Guayana, principalmente el de Surinam, que adoptó luego, y durante un tiempo, el nombre de “Willoughby Land”.
Tomado de la obra del profesor Bohm.