MÚSICA CLÁSICA – La semana pasada oímos al rumano Radu Lupu interpretando a Schumann. Hoy lo escucharemos respaldando el violín de Szymon Goldberg en una Fantasía de Schubert. Goldberg nació en Polonia en 1909 y murió en 1993, después de nacionalizarse estadounidense. Pasó su infancia en Varsovia, donde aprendió el violín desde temprana edad y con sólo 8 años se trasladó a Berlín para tomar clases con Carl Flesch. En dicha ciudad debutó en 1924 y poco después fue contratado como violín principal de la Filarmónica de Dresde, de donde pasó a la de Berlín, pero el ascenso del nazismo le obligó a cambiar de planes y recorrer Europa junto a la pianista Lili Kraus, debutando en 1938 en los EE.UU. Mientras tanto, sus familias, exiliadas en la isla de Java, eran internadas en campos de los japoneses. Acabada la guerra se estableció en América pero en 1955 fundó la Orquesta de Cámara Holandesa en Ámsterdam que dirigió hasta 1979. Por esa época se concentró en la enseñanza, de Yale a Juilliard, pasando por el Curtis Institute o la Manhattan School. Sus últimos años los pasó en Japón, de donde era su esposa, la pianista Miyoko Yamane y donde dirigía la Nueva Filarmónica Japonesa. Como adelantamos al principio lo escucharemos junto a Radu Lupu en la Fantasía para violín y piano en do mayor D. 934 (que ostenta el opus póstumo 159 en el catálogo de Schubert), subtitulada “Sei mir gegrüsst!”, y cuyos movimientos son: Andante moderato, Alegretto, Andantino y Allegro vivace.