EL MARCAPÁGINAS – Este 14 de julio la escritora italiana Natalia Ginzburg -nacida Levi- hubiera cumplido cien años. Acudimos al que podría haber sido su cumpleaños ofreciéndoles el análisis que Andrés Barba -escritor y traductor de este libro- hace de la segunda novela de Ginzburg, Y eso lo que pasó ,publicada por Acantilado.
Vida y obra se entremezclan en los comentarios de un Andrés Barba entregado a la escritora “absolutamente al nivel de contemporáneos como Pavese o Italo Calvino”. Calvino precisamente firma el prólogo de esta novela -exótica en la bibliografía de Ginzburg pues, la define Barba, “es una especie de thriller”- con potente principio que nos cuenta la historia de un amor desesperado; una confesión, escrita con un lenguaje sencillo y conmovedor, de la desgarradora lucidez de una mujer sola que durante años ha soportado la infidelidad de su marido y cuyos sentimientos, pasiones y esperanzas la abocan a extraviarse inexorablemente”. Un texto que Natalia dedica a su marido Leone, militante político de origen ruso asesinado por los nazis.
Andrés Barba recorre la vida y literatura de esta escritora ajena a lo grandilocuente -criticada por escribir “de las pequeñas cosas” – y nos habla de “la sorpresa del amor ajeno” que experimentaba Ginzburg, y de la pasión lectora que sienten todos los que se acercan a la autora de maravillosas obras como Todos nuestros ayeres y Léxico familiar.